
Todo comenzó con la organización de la conmemoración del centenario de la Revolución Francesa. Entre los muchos proyectos presentados, figuraba uno cuyos primeros estudios databan de 1884 y estaban avalados por el célebre ingeniero Gustav Eiffel, y el proyecto consistía en la construcción de una inmensa estructura metálica en forma de torre que sería vista desde una enorme distancia. El proyecto, lejos de enamorar a los parisinos, tuvo un enorme rechazo social, pese al cual finalmente la Torre de Eiffel sería levantada e inaugurada el 31 de agosto de 1889, tras tres años de obras y polémicas.
Todo pudo acabar en 1900
Pese a lo impresionante de la obra, lo cierto es que la Torre Eiffel no acababa de gustar, y los parisinos la veían como un inmenso armatoste de hierros, así que se fijó la fecha de 1900 como tope para ser desarmada, tras la conclusión de la Exposición Universal que debía albergar Paris en ese año.
Llegó el año 1900 y todo parecía indicar que la Torre Eiffel sería demolida pese a los intentos infructuosos de los que la admiraban por encontrarle un uso práctico para justificar su conservación frente a sus detractores, y finalmente, sería la armada francesa quien acabaría por salvar la vida de la Torre Eiffel, ya que tras unas pruebas del ejército con equipos de transmisiones se llegó a la conclusión de que la Torre Eiffel era un lugar privilegiado para la instalación de antenas y equipos de radio, con lo cual la Torre Eiffel ya tenía un uso práctico que provocaría su amnistía y pararía los proyectos de "ejecución".
la ciudad del amor, de las grandes avenidas, de los pasos por el Sena, del romanticismo hecho monumento, de las cenas a la luz de las velas, de la vida bohemia en Montmartre… París, la ciudad donde la Torre Eiffel es el símbolo de los amantes…
31 de Agosto de 1889. Con motivo de la celebración de la Exposición Universal en la Ciudad de la Luz, se inaugura una gigantesca torre metálica, diseñada por el ingeniero Gustave Eiffel que causó un importante rechazo social en la sociedad parisina de finales del siglo XIX. Tanto fue el revuelo por aquel “amasijo de hierros” que en el año 1900 estuvo a punto de ser desmontada. Sin embargo, su altura y su localización resultaron propicias para colocar antenas de comunicación que facilitaban, por aquel entonces, el trabajo de la Armada francesa. La altura inicial de 312 metros, alcanzó los 324 con la instalación de estos equipos electrónicos en su cima, y gracias a esta altura, la Torre Eiffel se convirtió en el edificio más alto del mundo hasta que en el año 1931 el Empire State Building le arrebató el puesto.
Curiosamente, la Torre Eiffel es 15 cm. más alta en los días de fuerte calor, debido a la dilatación del metal. En los días de viento se nota una pequeña oscilación, aunque ésta no la hace moverse más de 12 cm. Y es que la Torre Eiffel tiene 10.100 toneladas de peso, y 40 toneladas de pintura que se renueva cada cuatro años, así como dos millones y medios de remaches.
La Torre Eiffel siempre ha sido famosa también por ser la fuente de inspiración, no sólo de pintores y escritores, sino también de numerosos acróbatas que han intentado las más extrañas peripecias, desde el que la intentó bajar en bicicleta, a los que la usan para lanzarse en paracaídas desde la cima. Pero el caso más conocido fue el de un sastre de París, Reisfeldt, que con un traje alado se lanzó al vacío desde la punta intentando planear. En la autopsia determinaron que murió antes de llegar al suelo por un infarto de corazón.
Tres niveles visitables tiene la torre. Al primer nivel, distante del suelo en 57 metros, se puede llegar en ascensor o bien subiendo 360 escalones. En él existe un pequeño museo histórico en el que se puede ver en proyecciones desde las visitas a la torre de Charles Chaplin hasta la de Hitler durante la Segunda Guerra Mundial. También se encuentra aquí el restaurante Altitude 95, donde podremos degustar una maravillosa y romántica cena con espectaculares vistas al Sena y al Trocadero.
Segundo nivel
“Sólo” hay que subir 700 escalones desde el nivel anterior, o bien tomar el ascensor. A 115 m. del suelo, en él se encuentra el Restaurante Julio Verne, uno de los mejores de París.
Tercer nivel
En la cúpula, a 274 m. del suelo. En dís despejados se puede llegar a ver hasta a 72 km. de distancia. Subir hasta este punto cuesta actualmente 11,50 euros. 1652 escalones en total, aunque el ascenso por las escaleras desde el segundo hasta el tercer nivel está prohibido.
Pero si desde la cima podemos gozar de unas vista inmejorables de todo París, desde sus pies, también podremos disfrutar de un romántico paseo que nos llevará desde la Plaza del Trocadero y sus fuentes, hasta la mismísima Avenida de los Campos Elíseos y el Arco del Triunfo, o, a su espalda, los Campos de Marte, donde la juventud parisina reposa mientras toma el sol en los días de calor veraniego. A nuestro paso, tranquilo, nos encontraremos decenas de parejas que posan su amor en instantáneas robadas a esta escultura de hierro, señorial y galante. Una silueta famosa que en la noche luce sus mejores galas cuando cientos de bombillas la iluminan, sobre todo, cuando los diez primeros minutos de cada hora, centellean, parpadeando orgullosas.
Las luces que "pululan" por el cielo parisino durante todas las noches y que, si el cielo está claro, son visibles a 80 kilómetros de distancia, la Torre Eiffel exhibe una iluminación especialmente llamativa y brillante cuando, tras caer la noche, durante los 10 primeros minutos de cada hora (hasta las 2 AM normalmente, y hasta la 1 AM en invierno) se iluminan miles de bombillas centelleantes que le dan a la Torre Eiffel un aspecto más mágico aún si cabe del que tiene de por sí.
3 comentarios:
el titulo Todo pudo acabar en 1990, es 1900, corrigelo por favor
muy bonito lugar ...muy buena eleccion
MUY LINDO LUGAR
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